El financista Patricio Carey fue detenido el domingo en Ezeiza cuando volvía del Mundial de Qatar, en un vuelo proveniente de Roma.
La razón del pedido de detención fue porque un testigo, que ya había declarado en el transcurso de la investigación, volvió a presentarse y amplió la información.
En ese marco, aseguró que el Carey lo había intimidado para que no diera datos la primera vez que se sentó frente a autoridades judiciales. Esa situación que ventilaron los fiscales en esta nueva audiencia hizo que la jueza Carrara considerara que había posible entorpecimiento probatorio estando el imputado en libertad durante el proceso.
Además, los fiscales dieron a conocer nuevas operatorias irregulares llevadas a cabo por la financiera Cofyrco, que según afirmaron vendió dólares paralelos a directivos de Rosario Central como Ricardo Carloni (presidente en ejercicio de la institución), de Newell’s como Eduardo Bermúdez (ex presidente del club) y Gustavo Shanahan , actualmente procesado y a punto de ser juzgado como parte de la banda de narcotraficantes liderada por el peruano Julio Andrés Rodríguez Granthon.
Ese nuevo elemento fue interpretado por Moreno y Narvaja como un posible patrón repetido: Medrano necesitaba dólares para comprar la droga que luego estiraba y comercializaba en Rosario y Granadero Baigorria. Y Shanahan está procesado por proveer de dólares a la organización de Rodríguez Granthon para que adquiera estupefacientes que después vende en Villa Banana, en la zona oeste.
El financista no tenía prohibición para salir del país. Pero durante su viaje los fiscales Narvaja y Moreno detectaron nueva información para considerar que no debe transitar en libertad el proceso judicial en su contra. Actualmente, afronta un pedido de 5 años de prisión.
