Uno de los funcionarios más cercanos a Sergio Massa reconoció que el primer mes del 2023 marcará un aumento de precios superior a diciembre, incumpliendo la promesa del Ministro de Economía de que la cifra iría decreciendo hasta llegar al 3% en abril. El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central había anticipado que el número rondaría el 5,6%.
Si bien el Instituto de Estadísticas y Censos (INDEC) dará a conocer este martes 14 de febrero el número final, de Mendiguren se adelantó y dijo: “El número de la inflación será superior al del mes anterior“.
El funcionario luego expresó que “este modelo productivo tiene el número de desocupación más bajo de los últimos años”, pero agregó que “al que trabaja no le alcanza la plata y eso es lo que nos desvela”.
“Tenemos dos problemas. Insumos e inflación. Si el salario real vuelve a perder con la inflación, no hay modelo que sea sustentable”, afirmó en diálogo con Roberto Navarro, y agregó que “hay una inflación estructural complicada. El mundo acude a la inflación estructural más alta desde la Segunda Guerra Mundial”. “La inflación tiene mucho de contenido. Massa habla de un sendero de orden fiscal. Creemos premiar el crecimiento”, resaltó.
Los sectores que buscan una “devaluación brusca”
El secretario también apuntó contra los sectores concentrados que buscan una devaluación, con la consecuencia que ello tendría en la suba de precios. “No quiero que suene a excusa, pero acá hay mucha gente de capitales importantes que apuestan a una devaluación brusca desde agosto. Y hoy un país que no logra acumular suficientes reservas tiene mucha vulnerabilidad. Cualquier corrida que arman cuatro personas desestabiliza”. En ese sentido, reconoció que la combinación de no tener reservas, inflación y “licuación del salario real” es “terrible”.
