La pérdida de poder adquisitivo y la alta inflación por los precios de la energía están llevando a la economía alemana a la recesión y a la peor crisis de los últimos 50 años, coincidieron distintos economistas.
Debido a la inflación elevada, la situación financiera de los hogares se deterioró considerablemente desde principios de año, comentó el economista Kohler-Geib, e informo que los ingresos reales seguirán disminuyendo en la segunda mitad del año.
Las medidas preventivas hasta la fecha, entre ellas un intento por reducir el consumo, han hecho poco para detener un fuerte aumento en las facturas de los hogares.
El tercer paquete eleva a 95.000 millones de euros la cantidad asignada a la lucha contra la inflación desde que comenzó la guerra de Ucrania, el pasado 24 de febrero.
En Alemania, la inflación volvió a subir al 7,9 por ciento en agosto, después de caer durante dos meses consecutivos gracias a medidas de alivio previas.
No obstante, los expertos prevén que el nuevo aumento de los precios de la energía impulse el costo de vida generalizado a alrededor del 10 % para finales del presente año, lo que sería su tasa más alta en décadas.
