
Un binomio de acuerdos que no pasa desapercibido en los vaivenes de la política
Una vez más en la misma sintonía el gobernador Omar Perotti, y su par de Córdoba el gobernador Schiaretti, después del anuncio del gobierno, el domingo pasado, de cerrar el registro de nuevas exportaciones vinculadas a los subproductos de soja como la harina y el aceite, dos derivados de la soja que pagan actualmente un 31% de retenciones y la primera impresión es que el Gobierno podría eliminar el diferencial histórico y subir ese tributo a 33%, rechazan esta medida.
Perotti, volvió a despegarse del gobierno de Alberto Fernández y desde su red social twitter expresó:
“La suspensión de las exportaciones de harinas y aceite de soja frenará el ingreso de las divisas que necesita el país. Se debe tener cuidado con incentivar a la desindustrialización. Lo que necesitamos es agregar valor, generar empleos y lograr inversiones”.
El rafaelino, ya se había despegado del intento de expropiación de Vicentín, del cierre de las exportaciones a la carne y de las modificaciones a la ley de biocombustibles.
Un dato no menor :el senador santafesino del FdT, Marcelo Lewandowski, visitó la semana pasada la ExpoAgro de San Nicolás y tendió puentes con ruralistas.
Por su parte Schiaretti, también desde twitter manifestó que:
“En relación al cierre de las exportaciones de harina y aceite de soja rechazo esta medida porque perjudica la producción cordobesa y va en contra del ingreso de divisas que son necesarias para nuestro país”.
Rodríguez Larreta sostuvo que es una “pésima noticia el cierre de exportaciones de aceite y harina de soja, así como el potencial aumento de retenciones”. “Solo diez días después de haber prometido que no harían nada de esto, el gobierno demuestra que su palabra no tiene valor y hace exactamente lo mismo que dijo que no iba a hacer”, expresó el mandatario porteño de Juntos por el Cambio.
El ministro de la Producción de Santa Fe, Daniel Costamagna, no se quedó sin expresar su rechazo y salió a cuestionar las últimas medidas del gobierno nacional, según el funcionario, la decisión sería una maniobra previa a la suba de las retenciones a estos productos y advirtió que eso sería “un error” y “un retroceso al desarrollo de agregado de valor”.
PEROTTI-SCHIARETTI, este binomio que se viene repitiendo no con dichos sino con hechos y acciones, tan sólo recordar que en diciembre pasado, firmaron la inicialización del contrato con el Fondo Kuwaití para el Desarrollo Económico Árabe, tendiente a la realización de la obra del acueducto interprovincial Santa Fe-Córdoba.
El convenio se suscribió en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno de Santa Fe, con la presencia de funcionarios de ambas provincias y autoridades de la delegación de Kuwait, encabezada por el jefe de la misma, Tareq Al Menayes.

Esta obra histórica permitirá el acceso al agua potable a las zonas este y centro de la provincia de Córdoba, y centro-oeste de la provincia de Santa Fe.
La primera etapa de la obra tiene un presupuesto oficial de 59.330.958,14 dólares. Permitirá financiar el bloque “A” de la fase 1 de la etapa 1 del acueducto, entre Coronda (Santa Fe) y San Francisco (Córdoba).
Durante el acto, se firmó el contrato de préstamo y acuerdo de garantía entre las provincias de Córdoba y Santa Fe con el fondo soberano de Kuwait (organismo de asistencia financiera y técnica para países en desarrollo), que financiará la obra.
Precisamente, Schiaretti agradeció al Estado de Kuwait “por financiar, además de seis acueductos en la provincia de Córdoba, este acueducto interprovincial, que es un modelo de cooperación federalista en Argentina”.
