Tras la aparición de ballenas muertas en Península Valdés, la hipótesis que manejan las autoridades provinciales apunta a la ingesta de toxinas provocadas por la Marea Roja. Investigadores del INIDEP y el Conicet trabajan en la recolección de muestras para determinar la causa de las muertes de los cetáceos.
El intendente de Puerto Pirámides, Fabián Gandón, alertó este viernes sobre una crecida inusual de lo que se conoce como “marea roja” en los golfos Nuevo y San José, que se ubican en el interior de Península Valdés, donde se constató la presencia de toxinas muy por encima de los valores habituales, y se investiga si esta situación provocó la muerte de al menos siete ejemplares de ballena franca austral ocurrida en los últimos días.

Se contabilizaron 7 ballenas muertas en el Golfo Nuevo durante los últimos días entre los que se cuentan 6 hembras adultas y un macho subadulto.
Ambos golfos se ubican al sur y al norte de la Península Valdés, sobre el extremo noroeste del Chubut, que le dan a ese accidente geográfico la particular forma en el mapa de un hongo que se introduce en el mar.
En Puerto Pirámides, 200 kilómetros al norte de Rawson, la capital de Chubut, se espera para hoy la llegada de técnicos de salud ambiental para tomar muestras en la salida de la planta desalinizadora y así descartar o confirmar la presencia de toxinas.
Tememos que las toxinas ingresen por los chupadores que tiene la planta desalinizadora y hasta que eso no se descarte le pedimos a los vecinos que no consuman el agua de red y solo se limiten a la limpieza, pero no a la ingesta, insistió el intendente.
